13º: Epílogo.
- Alex... ganadora de este juego, ahora eres una Shinigami, te otorgo el poder sobre la muerte.
- ¿Por qué... hiciste este juego?
- Hehe... solo me quedan unos minutos de vida. ¿Sabes? siempre supe que ganarías.
- ¿¡Qué estás diciendo!?- Por primera vez, la chica levantó la cabeza. Desde que todo se había vuelto color negro, no había puesto ni un mínimo de interés... el tiempo parecía no correr...
- ¡Vamos! ¿No me digas que no te diste cuenta?- Se acerco hasta que sus huesos la rozaban.- Cada noche... cada semana... cada mes... atacando a personas "malvadas" ¿por qué? para para tus ansias de asesinar... asesinatos, simples, fáciles. Mas ninguno ha sido descubierto, ¿la razón? te encubría. Te encubrí por que yo fui el mismo que te metió esas ganas de sangre.- Cada vez su cuerpo se iba degradando mientras hablaba.- Y verás, este juego fue pura diversión...
Ya del Shinigami no quedaba nada. Alex... no se movía, estaba estupefacta, mas tarde calló de rodillas y lloró, sola, completamente sola en la negrura eterna.
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Me siento cansada... aturdida, desde que tengo uso de razón me siento así. Ya no sé cuanto tiempo ha pasado desde que me volví... la muerte, ¿Años, décadas, milenios? Ni aún que me esfuerce puedo saberlo. Lo único que sé, es que cada vez estoy mas débil y voy a morir. Me acerco y observo la tierra. Bueno, QUE EL JUEGO COMIENCE.
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